La custodia de un hijo se centra en el mejor interés y bienestar del niño o niña, es por eso que se alienta a los padres a llegar a un acuerdo voluntario sobre este aspecto. Esto puede incluir acuerdos sobre la residencia principal del niño, los períodos de visita y las responsabilidades parentales. De lo contrario, el tribunal escucha los argumentos de ambos progenitores, y toma una decisión para emitir la orden de custodia. Es muy importante señalar que en nuestro país no se puede demandar la custodia compratida de los hijos. Este sistema solo puede pactarse por mutuo acuerdo de los padres.
El régimen de visitas puede variar según las circunstancias individuales y las decisiones judiciales. Los tribunales favorecen la flexibilidad en los acuerdos de visitas para adaptarse a las necesidades de la familia y del niño. Los períodos de vacaciones y festividades, como Navidad, Año Nuevo y otros días festivos, se dividen de manera equitativa o de acuerdo con lo establecido por el tribunal.
Cada caso de custodia es único y se decide en función de las circunstancias individuales y del interés superior del niño, además se promueve la igualdad de derechos y responsabilidades parentales. Asimismo, si los padres viven separados, la patria potestad será ejercida por aquel que tenga a su cargo el cuidado personal del hijo o hija, o sea, el padre, la madre o ambos en forma compartida.
Actualmente existen 3 tipos de cuidado personal de los hijos en Chile, la primera es la convencional donde se establece un acuerdo entre los padres y la custodia es compartida. La segunda es la Legal que determina el cuidado de los hijos ante la ausencia de acuerdo entre los padres. Y el tercero es el Judicial, en el que el juez podrá determinar el cuidado personal de los menores a otro de los padres o limitarlo a uno solo.
Las decisiones relacionadas con la custodia y el cuidado de los hijos se toman considerando lo que mejor beneficie al bienestar y desarrollo del niño. En este proceso también es importante la opinión del niño, pero en ningún caso puede escoger con quién se debe quedar. Por eso se recomienda llegar a un acuerdo entre los padres.
Lo primero es contratar los servicios de un abogado de familia, para que conozcas tus derechos, opciones legales y te guíe en todo el proceso. Luego, se procede a la realización de la demanda donde se incluyen los motivos del divorcio, así como las solicitudes sobre custodia de hijos, pensión alimenticia, división de bienes y otros asuntos relevantes.